jueves, 25 de abril de 2013

Objetos Asesinos

Erase una vez un hombre llamado Pepito, el hombre era alto, deportista, muy educado y bastante temerario. Pepito estaba casado, su esposa se llamaba Pepita y los hijos Alexander y Mario. Era de Badajoz igual que su esposa y sus dos hijos. Un día, Pepito cogió el coche, era un chevrolet  nuevo, iba por la autopista a 145 kilómetros por hora, sin cinturón, nunca cumplía las normas. Era de noche, hacia mucho viento, estaba granizando, aveces caía algunos rayos... Entonces no se veía nada, y de repente, cuando menos se lo esperaba se choco de frente con otro coche, Pepito salio por el cristal disparado, dio una voltereta en el aire y callo de pie. Salio de la carretera y estaba andando por el arcén, allí le pico un mosquito africano. Le picaba mucho. A los cinco minutos se dio cuenta de que era alérgico a las picaduras de los mosquitos africanos. Y paso a vivir a la nueva vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario